Carlo Santi y Vittorio Borachia, se conocieron cuando ambos eran estudiantes en la Escuela Politécnica de Milán durante la década de 1940 y encontraron un terreno común para explorar el mundo de la arquitectura y el diseño. Carlo Santi trabajó como arquitecto, diseñador y urbanista, Santi se involucró en investigaciones urbanas desde un profundo deseo de mejorar el paisaje urbano y rural, interés que compartió con Vittorio Borachia.
Vittorio Borachia trabajó como arquitecto, diseñador y durante su carrera fue nombrado profesor de Planificación Urbana en la Escuela Politécnica de Milán. Tenía un gran amor por la naturaleza y se esforzó por abarcarla tanto en la arquitectura como en la planificación urbana, siempre buscando la fusión entre el crecimiento y el desarrollo con la sostenibilidad ecológica.